La fuente de la eterna juventud no existe pero, podemos ayudarnos de la naturaleza para combatir factores externos que afectan a nuestro envejecimiento.
De hecho,hay muchos laboratorios farmacéuticos y cosméticos que centran numerosos esfuerzos y recursos en el estudio pormenorizado de distintos componentes de alimentos y plantas. En ellos, hallan compuestos de distinta naturaleza que se extraen para darles una aplicación cosmética.
Los alimentos más ricos en antioxidantes son las frutas y las verduras crudas:
-los frutos del bosque,
-la zanahoria,
-la manzana,
-el tomate,
-el brócoli,
-la berenjena o la remolacha,
Entre otros. Los antioxidantes más conocidos son la vitamina C y E y los carotenoides (betacaroteno o pro-vitamina A).
Tambien existen varias plantas medicinales ricas en antioxidantes que también pueden sernos de gran ayuda para mantener bajo control el envejecimiento.